Por: Verónica De La Hoz Bejarano

 

 

Una de mis actividades en la lista “por hacer” finalmente quedó marcada como hecha. En tiempos de cuarentena terminé el curso Comunicación para el Desarrollo Rural de la FAO  (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura).

 

Entre las conclusiones del curso está que para el éxito y la continuidad de las estrategias de CpD (Comunicación para el Desarrollo)  es esencial una correcta capacitación de facilitadores que estén vinculados a la comunidad en la que se implementa un proyecto en particular.

 

Un facilitador tiene la función de instruir sobre determinadas temáticas y promover la reflexión, el intercambio de conocimientos, el diálogo, la participación, etc. de los integrantes de la comunidad involucrada en el proceso.

 

Para ello no sólo deben estar enterados sobre los asuntos específicos de la iniciativa, sino que también deben desarrollar y dominar técnicas y habilidades de comunicación que les permitan cumplir su objetivo.

 

 

Ocho habilidades básicas para la facilitación

 

En el capítulo “Implementación de actividades de CpD en terreno”, se menciona:

 

 

  1. Manejar el flujo de la discusión.
  2. Escucha activa / reflexiva.
  3. Motivar a otros a hablar.
  4. Formular las preguntas correctas.
  5. Interpretar el lenguaje corporal.
  6. Parafrasear.
  7. Imitar.
  8. Resumir.

 

Dado que no siempre los facilitadores que participan en un proyecto cuentan con estas habilidades, es importante considerar la ejecución de un plan de capacitación en esta área como parte de la estrategia general de CpD.

 

 

Pasos para la capacitación de facilitadores

 

La Guía para la Capacitación en CpD (FAO, 2016) recomienda el siguiente proceso para diseñar, organizar y realizar cursos y talleres, e indica la importancia de que sean adecuados para cada contexto particular.

 

  1. Identificar a los participantes y sus necesidades de capacitación.
  2. Formular los objetivos de aprendizaje.
  3. Organizar el contenido de la capacitación.
  4. Identificar a los especialistas.
  5. Definir fecha, lugar y duración.
  6. Seleccionar los métodos de capacitación y preparar los materiales.
  7. Desarrollar una estrategia de evaluación.
  8. Dar seguimiento y facilitar el intercambio de conocimientos entre los participantes.

 

 

Acerca de un buen facilitador

 

A continuación, algunas frases del Manual de Comunicación para el Desarrollo Rural (FAO, 2016) que ayudan a comprender la labor del facilitador:

 

Por lo general, un buen facilitador es abierto y sincero, creativo en estilo, enfoques y técnicas, y capaz de hacer que todos se sientan cómodos al compartir opiniones e ideas. (Pg. 296)

Un buen facilitador debe ser capaz de extraer de los miembros de la comunidad (u otros participantes) ideas y opiniones enfocados en el tema, evitando desviarse. (Pg. 59)

Un buen facilitador debe ser capaz de manejar un GF [Grupo Focal] de tal manera que la sesión fluya naturalmente y de forma espontánea. (Pg. 62)

Un buen facilitador debe tener una buena comprensión del tema o asunto que se trata, con el fin de orientar y poder seguir el hilo de la discusión, reconociendo los argumentos fuertes y débiles entre los planteados. Pero el facilitador también debe ser consciente de cuándo parar, observar y escuchar a lo largo de la discusión y dejar que las soluciones provengan de los participantes. (Pg. 296)

Se requiere un facilitador hábil que pueda estimular la discusión en grupo, sin perder de vista los objetivos, así como manejar a los participantes negativos y destructivos. (Pg. 62)

Si la mayoría de los participantes no saben leer ni escribir […] es el deber del facilitador instruirse con exactitud sobre lo que los participantes están tratando de representar. (Pg. 67)

Los facilitadores siempre deben tratar de lograr un buen equilibrio entre las discusiones teóricas y las aplicaciones concretas, la conceptualización y las actividades prácticas. (Pg. 262)

 

La capacitación integral de los facilitadores contribuirá a la duración, mejora e incluso réplica de la iniciativa; y por otro lado, aportará a la formación del talento humano para proyectos que a futuro se implementen en la región.

 

 

Nota

 

La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura -FAO- define y enfoca la Comunicación para el Desarrollo así:

 

La comunicación resulta esencial para el desarrollo sostenible, porque implica directamente a las personas y a las comunidades en los procesos de toma de decisiones que afectan a sus propias vidas y al desarrollo futuro. La Comunicación para el Desarrollo (CpD) es un motor de la agricultura y del desarrollo rural. Es un proceso de comunicación orientado al logro de resultados y basado en el diálogo y la participación. La CpD puede maximizar el impacto y la sostenibilidad de las iniciativas de desarrollo, facilitando el intercambio de conocimientos, la toma de decisiones bien fundamentadas y la acción colectiva.

 

Para conocer más visita: www.fao.org/communication-for-development/es/ 

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Verónica De La Hoz Bejarano

Comunicadora Social y Periodista, especialista en Gerencia, con experiencia en el diseño y ejecución de planes de comunicación estratégica y en la producción de contenidos para medios análogos y digitales, redes sociales, herramientas e-learning y productos editoriales. Facilitadora en el desarrollo de habilidades de comunicación para personas y grupos.

https://www.veronicadelahoz.com/

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